Me he quedado reflexionando03-08-2018
Doy gracias a Dios la lucidez que me dio de estudiar y formarme (intelectual como humanamente) antes de ingresar a la vida religiosa. Me encuentro hoy a personas desorientadas que intentan encontrar en el discurso religioso la salida de TODO, o la salvación, que los quite de una vida que no pueden vivir y que el orgullo no les permite cambiar, utilizando así el nombre de Dios en vano.
Me encontré hace pocos días diciendo: "La religión no invalida la psicología".
Me encontré hace pocos días nuevamente con la experiencia que se quisiera equiparar "teología" a sanidad mental o auto justificar la inmadurez con "virtudes teologales".
La experiencia también me muestra la existencia de "loc@s" cristianos muy amados por Dios y llenos de "virtudes" que hacen aguas, porque su "locura" no les permite ver su auto-incoherencia. Pero esos no son los locos por Dios que han cambiado el mundo.
Creo en la Locura de Dios. En esa locura que te hace más cuerdo cada día, más implicado en la realidad que llega a doler (nos guste o no) y tan incluidos en ella que podemos cambiarla con nuestra vivencia cristiana.
Creo en la locura que te hace bajar la cabeza del orgullo ante la evidencia de la realidad , te eleva a ponerte en las manos de Dios y te lleva a buscar, activamente y pagando el coste, las herramientas externas necesarias para hacer de esa realidad "El Reino".
Me he quedado reflexionando y no me gusta que se acredite a Dios aquello que pertenece al "Cesar".